Un día, Fernando, un niño de diez años, quiere saber qué sucede cuando se dice una mentira. Entonces, prueba varias veces y su vida se va complicando; por ejemplo, cuando miente acerca de su padre. Sin darse cuenta se ve inmerso en una espiral de invenciones y falsedades, de la que ya no sabe como salir. Al convertirse en un mentiroso, peligra su amistad con Fátima, su mejor amiga, y se tiene que enfrentar al matón de su clase, Gamboa. Pero, poco a poco, las cosas mejoran y Fernando comprende, por fin, qué debe y qué no debe hacer y qué debe decir y qué no. Así, deja de ser un mentiroso y de meterse en líos.